diumenge, 8 d’abril del 2018

Cómo los referéndums rompen las democracias




The Dutch parliament have just agreed to abolish advisory referendums. I don’t blame them. I did not much care for the result of the latest referendum that was held in the UK, so I confess to disliking referendums with the fervour of a sore loser.

The winners no doubt feel more cheerful about the idea but even they may agree with this: the campaigning process was corrosive, and the consequences for the health of British politics have been even worse.

This scepticism might be seen as kicking democracy when it is down. The Pew Research Center found last year that 17 per cent of Americans think military rule would be a good idea, while 22 per cent favoured a strong leader “without interference from parliament or the courts”. The numbers in the UK were fairly similar.

Most of us still believe in democracy, but even its staunchest supporters will admit that it has its flaws. The most obvious of these is that we voters pay little attention to the issues. Consider Jeremy Corbyn’s recent shift; his opposition Labour party now advocates the UK leaving the EU but remaining in the (or “a”) customs union — not to be confused with the single market. This has been roundly agreed to be a significant change in the political landscape. But the now-momentous-seeming distinction between the customs union, the EU and the European single market was obscure to all but the wonkiest of wonks until a couple of years ago (myself included). It surely remains obscure to most voters today.

I do not mean this as a criticism of the voters. Why should we pay attention? We have other things to do. A decade ago, economist Bryan Caplan’s book The Myth of the Rational Voter (UK) (US) argued that it made sense for us to express our misconceptions, prejudices and tribal loyalties at the ballot box, since doing so was almost costless.

A voter thinking of popping to the polls and then trying out a new pizzeria would be perfectly rational in checking out TripAdvisor, rather than the party manifestos. This is because her vote will almost certainly not make any difference to her life, but her choice of restaurant almost certainly will. We vote because we see it as a civic duty, or a way of being part of something bigger than ourselves. Few people go to the polls under the illusion that they will be casting the deciding vote.

If voters are not paying close attention, then what might we expect from a referendum? The psychologist and Nobel laureate Daniel Kahneman, in Thinking, Fast and Slow (UK) (US), writes, “When faced with a difficult question, we often answer an easier one instead, usually without noticing the substitution.”

The difficult question in a referendum might be, “Should the UK remain in the EU?”; the easier substitution is, “Do I like the way this country is going?”

Another simple heuristic is this: “If one of the options was awful, they wouldn’t be asking, would they?” Except that in the UK’s referendum on EU membership, for reasons of short-sighted political expediency, they did ask.

Of course, any democratic system is weakened by the fact that voters are not paying close attention. But representative democracy provides a line of defence against voter ignorance, by asking us to elect someone to make considered choices on our behalf.

I can’t fix a blocked drain, so I ask a plumber to do it for me. I am not sure whether that blotch on my cheekbone is malignant, so I ask a doctor. And I am, truth be told, a bit vague about the difference between the European Court of Justice and the European Court of Human Rights, which is why I elect an MP who can call on the advice of civil servants and the House of Commons library on my behalf.

I may make the same knee-jerk, tribal decision in an election as in a referendum, but at least I will be assisted by my recognition of longstanding party brands. Just as we recognise brands like Apple, Coke and HSBC, most voters know the difference between Conservative and Labour, or Republican and Democrat. We vote for people who seem to share our instincts and trust them to handle the details.

These brands have another advantage: they provide their owners some modest incentive to tell the truth and keep their promises. The shortlived campaigns that coalesce to fight referendums have no such constraints.

That points to one other disadvantage of a referendum: there is nobody to hold to account after the result. Theresa May campaigned for Remain. Three-quarters of MPs were for Remain. So if the result of the exit process goes badly, who can be blamed? Not them — and we’re certainly not going to blame ourselves. The buck stops nowhere.

No voter can master every issue, and few voters try. Any democratic system must cope with that. Referendums, instead, invite us to ignore the question, give the snake-oil peddlers an edge, concentrate our ignorance into a tightly focused beam, and hold nobody accountable for results. They magnify the vulnerabilities of our democracies and diminish their defences. The Dutch are wise to avoid them. | TIM HARFORD
Publicado en el Financial Times el 2 de marzo de 2018




Asunto interno


(...)
Los jueces alemanes tienen dudas de que la palabra violencia describa parte del método empleado por los nacionalistas catalanes en su asalto a la democracia española. Son dudas razonables, que comparten muchas personas, juristas o no, en España. La instrucción del juez Llarena ha recibido diversas críticas por su empeño en justificar, a partir de la violencia, el tipo penal de la rebelión. Pero la procedencia o no de esas críticas habrán de determinarlas los tribunales españoles. Insólitamente los jueces alemanes no han depositado en ellos la resolución de sus dudas, sino que se han adelantado a su decisión absolviendo en la práctica a Puigdemont del delito de rebelión. Haciendo, por lo tanto, muy rentable su huida de la Justicia española y dando un insospechado apoyo fáctico a la constante denuncia nacionalista de la baja calidad democrática del Estado de Derecho español. No solo han hecho eso los jueces alemanes. Según su resolución, que desbrozaba ayer María Peral en El Español, la posibilidad de la extradición del prófugo a causa de un delito de malversación está también en el aire. Los jueces, enmendando radicalmente la plana a la instrucción, exigen más información, más aporte fáctico, al juez español. De nuevo se erigen en instructores de la causa. La extradición no solo peligra por esa razón. La ley alemana relativa al auxilio judicial internacional en materia penal dice en su artículo 1: «La extradición no será admisible sobre la base de un acto político o de un acto relacionado». No parece difícil que los abogados de Puigdemont tengan éxito en las alegaciones que relacionen la malversación con el acto político de la convocatoria del referéndum de autodeterminación.

Y es en esas dos palabras, acto político, donde se resume el inmenso problema de este asunto. Buena parte de la opinión constitucionalista española se niega a aceptar que los nacionalistas hayan cometido un delito político. Es absurdo. Los nacionalistas catalanes han quebrado la ley para obtener un beneficio político. Su delito es de naturaleza política como el del violador es de naturaleza sexual o el del estafador de naturaleza económica. La naturaleza política del delito nacionalista es la misma que la del golpista. El que Milans del Bosch pusiera los tanques en Valencia y Puigdemont las masas encuadradas de la Anc no altera la idéntica naturaleza de sus delitos ni la evidencia de que ambos se alzaron contra el Estado democrático. La no aceptación de que hay delitos políticos y por lo tanto delincuentes políticos, otorga a la política un carácter no punible, fuente de todo tipo de manipulaciones. Entre las más veteranas y despreciables, la que permite oponer las soluciones políticas a las soluciones judiciales.

(...)

El daño irremediable que los jueces alemanes han causado va mucho más allá de la circunstancia personal de Puigdemont. Los jueces alemanes han absuelto al Proceso secesionista. Lo han absuelto en sus métodos, al no percibir violencia en la actividad intimidatoria de un grupo de dirigentes que utilizó tanto a su policía como a sus ciudadanos, tanto su poder político como su poder social, para incumplir repetida y gravemente la ley. Y lo han absuelto también en sus objetivos. En torno a la resolución de Schleswig-Holstein -y de la correcta traducción de la ministra- gravita apenas disimulado por la prosa leguleya el reconocimiento del derecho a la autodeterminación de los pueblos. De los hirsutos pueblos españoles, naturalmente. Durante mucho tiempo Europa transmitió a España que el desafío nacionalista era un asunto interno. Un asunto interno de los catalanes querían decir. | ARCADI ESPADA

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Esto no absuelve a Franco, esto retrata a los totalitarios del nacionalismo lingüístico catalán

Un hilo de Jara

FRANCO FUE MÁS PERMISIVO CON EL CATALÁN QUE LA GENERALIDAD CON EL CASTELLANO. 
HILO➡️ 
Año 1944. BOE firmado por Franco. Régimen notarial Art. 149 por el que se debe redactar los documentos en castellano y en catalán 

#Pol émicaInmersiónESP (boe.es/datos/pdfs/BOE...)
Año 1948. Libro de familia en catalán.
Año 1960. Periódicos catalanes en el franquismo donde se publica la creación de nuevos certificados para premiar obras escritas en catalán (hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1960/0...)
Año 1963. Salomé canta en catalán la canción ganadora del festival del Mediterráneo.
Año 1963. Visita de franco a Cataluña y recibimiento por parte del Ayuntamiento con un "Franco benvingut a Lleida"
Año 1963 también. 
Salomé canta en catalán «Se'n va anar» la canción ganadora del festival del Mediterráneo.
Año 1964: 
Placa que conmemora la transferencia a perpetuidad la concesión del canal D, Urgell a la comunidad general de regantes. Hasta el nombre de Franco en catalán
Año 1969: 
El Tribunal Supremo condenado al periodista N. Luján a 8 meses de prisión por publicar la carta de un lector y la consideración "se convirtió en conceptos de tipo ofensivo para la lengua catalana, cuyo libre uso particular y social se respeta y garantiza" ( hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1969/0...)
Año 1967. 
Periódico escaneado de La Vanguardia donde se publica 5 horas de catalán en las escuelas catalanas. (hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1967/0...)
Año 1967. 
Hasta en TV. Informativos en RTVE en catalán sobre la cultura y las tradiciones de Cataluña. (rtve.es/television/201...) Año 1975. 
BOE donde se establece la enseñanza de la lengua catalana garantizando libros de textos para tal fin. (boe.es/boe/dias/1975/...)
Muchos premios a la lengua catalana como el 'Josep Pla', 'Lletra d'Or', 'Sant Jordi' ... etc, o la puesta en marcha del darquismo durante el franquismo. 
hay infinidad de ejemplos en hemeroteca. No voy a cansar. No solo el catalán como lengua NO fue prohibido ni tampoco su cultura y tradiciones. 
Programa de TVE. Escena de un casteller. El narrador se desvive en halagos y admiración. Año 1946: (youtu.be/6tFIf2-QbmE?t=3)
La escritora catalana Mercedes Salisachs: 
«No es cierto que el catalán está prohibido durante el franquismo. Lo que pasa es que no era oficial, se podía escribir en catalán y sí podía publicar en catalán, pero no era oficial ». El tema de la inmersión no es solo el conocimiento de las lenguas en profundidad, sino también el derecho del niño a aprender en su lengua materna porque es con ella con la mejor comprensión de los conocimientos (Matemática, Historia ...) en su vida escolar.
Él puesto a cantar a Salomé dos veces. 
Es que le pidieron un bis ... y yo ... pues también. 
😁
Más ... 
Premio Mercè Rodoreda, año 1954, un Pere Calders por "Cròniques de la veritat oculta", escrito y evidentemente publicado en lengua catalana.
Aquí tropecientos premios literarios como el anterior, a la obra escrita en catalán. Desde el año 1942 hasta los últimos años del franquismo. (dolcacatalunya.com/2014/03/cuando...) Aquí este video que me ha pasado @FrayJosepho de la alegría de la huerta Lluís Llach cantando en catalán en un programa de RTVE. 
Año 1972.
También se compusieron himnos para el FC Barcelona en catalán. 
(vía @_David_Bowman_ ) 
Van del año 1949 al real de 1974 
▪ "Barcelona semper amunt" 
▪ "Himne a l'Estadi" en el Camp Nou que se inauguraba. 
▪ "El Cant del Barça" 
Todo en catalán. (arxiu.fcbarcelona.cat/web/castellano...) Y con este hilo no estoy diciendo que Franco es la firma de la Carta Europea de Lenguas Regionales o Minoritarias 😉 ... que por cierto, España no solo es un país firmante sino que es el país que ¡más! se ha comprometido Cada país debe elegir al menos 35 medidas de protección de las 98 que tienen y el grado de protección: máximo, medio o mínimo.
España se comprometió a aplicar 69 medidas. Suiza se acerca algo a España con 52. España además eligió en todas las medidas el grado MÁXIMO de protección. ¿Saben que el Instituto Cervantes fomenta no solo el español como lengua común ... sino todas las demás lenguas españolas? 
En el caso de la imagen, cursos de catalán en Berlín.
Voy añadiendo algunos de los documentos que me van pasando tuiteros. 
En este caso (vía @ RodrigoDdeV13 ) un catecismo de 1963. 
También se encontró varios como este de 'GIRONA 1947' con la portada y todo su texto escrito también en .... adivinen ... ¡catalán! 🙂
Pongo siempre enlaces que llevan a los documentos en cuestión, pero esta vez me ha olvidado. 
Es una web de coleccionistas de 2ª mano, por qué queréis comprar ese catecismo en catalán del año 1947. 
(No diréis que no os doy facilidades ... 😊) (todocoleccion.net/libros-segunda...)
Y al igual que se protege, aunque fuera mínimamente el catalán, también las otras lenguas. 
El BOE publicó una Orden de Educación (1952) creando en la Universidad de Salamanca la Cátedra «Manuel de Larramendi» para el estudio del euskera. En su parte expositiva el documento dice:
También en el País Vasco con acuerdo de la Diputación de Guipúzcoa (1953) al aprobar la creación del Seminario de Filología Vasca «Julic de Urquijo». 
Y en San Sebastián con la reanudación (1954) de las actividades de la Cátedra de Lengua Vasca, creada en diciembre de 1917.
Y aunque hubiera sido alguna represión hacia las lenguas regionales en los primeros años de dictadura, se fue suavizando en la primera década. 
En seguida se publicaron innumerables libros y abrieron academias para la enseñanza del vasco. (todocoleccion.net/libros-segunda...)
En fin ... hay unas 7.000 lenguas vivas en el mundo, repartidas en 194 países, pues España es, tristemente, el único donde hay regiones cuya lengua oficial y materna es una parte IMPORTANTE de su población, se PROHÍBE como vehicular. 
Debería hacernos pensar.