dilluns, 21 de gener del 2019

Por qué 'El Reino' será la gran ganadora de los Goya 2019




Acabo de ver la película 'El Reino'. Esperaba algo mejor. Algo más que un envoltorio muy logrado pero sin nada dentro. Algo más allá del tópico, la pereza intelectual y el nihilismo de pandereta que alimenta y se alimenta de esa supuesta España que 'no tiene solución'.

Se presenta como la película necesaria sobre la corrupción en España, pero en realidad no nos cuenta nada sobre la misma, sobre como se hace posible y como se expande, sobre su dimensión real y sus efectos corrosivos en la sociedad. Serviría igual el tráfico de drogas o la prostitución forzada, porque el objetivo de la película no es otro que exhibir a un tío cutre al que le viene el canguelo cuando es descubierto por la ley.

Sorogoyen tenía la oportunidad de ofrecernos una tragedia shakesperiana -la del irrelevante ambicioso traicionado y abandonado a su suerte por los suyos- pero se le ha quedado en un Torrente de mayor poder adquisitivo. Parece una maldición, pero el cine español -o gran parte de él- nunca pierde la oportunidad de perder una oportunidad.

Tras un inicio en el que temes lo peor, la película se centra en el personaje que concreta la corrupción y en su desesperada huida hacia adelante. Un periplo que mantiene la tensión narrativa con situaciones inverosímiles, grotescas o surrealistas -como la que transcurre en la casa ocupada de estranquis por la hija licenciosa del 'cerebro' de la corrupción- para estrellarse en un pretencioso diálogo final, mediocre y doctrinario, entre el corrupto y la Ana Pastor de turno, que es un insulto a la inteligencia del espectador.

'El Reino' será, pues, la gran ganadora de los Goya 2019.