dimarts, 4 de setembre del 2018

Confirmado, el catalanismo político ha llegado a su fin




Tras estas dos noticias de hoy, reproducimos a continuación un articulo publicado hace un año por uno de nuestros colaboradores que ya predijo el final de la aventura separatista.


Lo que se ha dado en llamar en Cataluña el 'procés' hacia la independencia está teniendo un final caótico. Y no puede ser de otra manera, porque los derrotados por la legalidad constitucional española están perdidos. Tienen votos, pueden formar gobierno, pueden presidir la Generalidad, pero están perdidos.

El catalanismo político ha jugado en los límites de la legalidad mucho tiempo, ignorándola cuando algunas sentencia judiciales no les daban la razón. Un equilibrio que se sustentaba en la inacción del poder central y que han roto por una apuesta mayor que pensaban tampoco tendría coste. Y lo ha tenido, muy grave. Pero lo peor no es el control de la Generalidad por el Estado, ni los presos en las cárceles, reos de duras condenas.

Lo peor es que la aplicación del artículo 155 de la Constitución supone el final de etapa de una generación que ha jugado con fuego, construyendo con palabras un 'procés' de cartón piedra, que por el material incautado por las fuerzas de seguridad, ni los protagonistas creían en él, ni sabían como concretarlo.

El catalanismo político ha terminado porqué ahora no hay relato posible. ¿Que programa va a hacer suyo un nuevo gobierno?: ¿la idependencia, la desobediencia, la hacienda catalana, "tenemos prisa", "no nos rendiremos"?. Esto ha terminado, veremos gente en la calle manifestándose, votos en las urnas y mucho ruído. Pero en unos años el griterío no se va a distinguir de los Sanfermines de Pamplona, de la Feria de Abril de Sevilla, de las Fallas de Valencia.