diumenge, 18 de març del 2018

Y en Barcelona la gente gritó: ¡Valls, President!





Manuel Valls, este francés nacido en el barrio de Horta de Barcelona, ex primer ministro de Francia, ha sido, si cabe, el orador más aplaudido este mediodía en la manifestación convocada por Societat Civil Catalana para reclamar 'seny' y un gobierno para todos los catalanes.

Valls, con un profundo y electrizante discurso, tanto en la forma como en el fondo, ha emocionado a millares de ciudadanos ante la estación de Francia. 'Esa estación que tan bien conozco, donde marchábamos y llegábamos con mis padres'. Tan hondo ha tocado Manuel a la gente, que se han desbordado voces diciendo y repitiendo: 'Valls, President!'.

'He venido a deciros que estoy con vosotros en este combate, que es historia para Cataluña y para España. Quiero hablar a todos los catalanes. A esas familias, como la mía, divididas porque unos han dividido Cataluña, porque unos han partido Cataluña, porque unos han querido dividir a España y separar a Cataluña de España, cuando España y Cataluña tienen una gran destino común en el mundo de hoy'.

'Pero, ¿que es Cataluña?. Cataluña es una identidad. Una de esas identidades tan fuertes que existen en España (...) Cataluña es una cultura generosa, una cultura abierta, no una cultura cerrada, replegada, racista, separatista. ¿Que es Cataluña? Cataluña catalana, Cataluña española. Porque España sin Cataluña no es España y Cataluña sin España no es Cataluña'.

Para Valls, el proceso separatista ha fracasado. Y ¿por qué ha fracasado? 'Porque nacionalismo, porque cambiar las fronteras, porque un proyecto que le dice a los otros que no son de los nuestros, ese nacionalismo es guerra. Es guerra. Europa son 70 años de paz. Europa permitió a España, a Portugal, a Grecia y después a otros países del bloque soviético, incorporarse en un conjunto que garantiza la paz, la democracia y el estado del bienestar. Esto es Europa'.

Y aquí, Valls denuncia la mentira de los nacionalistas catalanes:'Europa dijo muy claramente que no había futuro para una Cataluña independiente, que no había ninguna posibilidad para Cataluña de quedarse en la UE, en el euro, que era un callejón sin salida. Mentían cuando decían que era posible salir de España y quedarse en Europa. Esto es una mentira. No ha habido ningún dirigente europeo que quiera permitir que se cambien las fronteras y que fracase uno de los estados más importantes de Europa. Importante por la economía, importante por la población, importante por el idioma español que hablen millares y millares de personas en todo el mundo, importante por la cultura porque España dominó al mundo, porque Europa necesita a España. Este es el mensaje de un dirigente francés hoy. En París, en Bruselas, en Waterloo, en Berlín se quiere una España unida, una Cataluña orgullosa de ser catalana, española y europea'.

No se ha callado nada y ha puesto el dedo en la llaga que más duele. Lloró por los atentado de Barcelona y de Cambrils y 'lloré en ese mes de agosto, después de los atentados, porque una minoría, una monoría que se hizo sentir en el mundo, silbó al Rey de España y al Gobierno español en una manifestación que era, antes que todo, una manifestación en solidaridad con las víctimas del terrorismo'. Él, que siendo primer ministro de Francia, recibió la desbordante solidaridad de jefes de Estado y de gobierno, de las fuerzas políticas, de los ciudadanos europeos, en la gran manifestación que hubo en París tras los atentados de Charlie Hebdo y los otros atentado en la capital francesa.

Y cerró su discurso con tres vivas y en tres lenguas: 'Visca Catalunya!, ¡Viva España! y Vive l'Europe!